El Mercado Laboral en Tiempos de Crisis | FACEA UDEC
El Mercado Laboral en Tiempos de Crisis

Escrito por Adolfo Hernández

enero 29, 2021

Alarmante pérdida de puestos de trabajo a los pocos meses después del inicio de la pandemia.

Uno de los mayores impactos de las crisis económicas recae en el mercado laboral donde las evidencias acumuladas de varias de estas crisis nos han mostrado que estas se manifiestan en alzas significativas en la desocupación, la destrucción de empleos y en algunos casos la reducción de la participación laboral con todos los impactos que ella conlleva en los ingreso y bienestar de las personas y sus familias.

Ya cerrado el año 2020 y con la pandemia del Covid-19 todavía en expansión hemos podido ver la evolución del mercado laboral donde entre los datos más llamativos ha sido la alarmante pérdida de puestos de trabajo a los pocos meses después del inicio de la pandemia. El número de ocupados antes del Covid-19 había llegado a 9 millones de persona y ya en los meses de invierno del 2020 se habían perdido la impresionante suma de 2 millones de empleos, número que, sin lugar a duda, no ha pasó desapercibido, especialmente considerando el hecho que nuestra economía se demoró una década en generar ese número de puestos de trabajo los que se perdieron irremediablemente en un par de meses.

Este indicador ha demostrado ser más robusto y mide en forma más precisa la magnitud del impacto de esta crisis sanitaria en comparación con lo medido por la tasa de desocupación. En efecto, a pesar que observamos el año pasado un aumento en la tasad de desocupación durante los meses de inviernos en el peak de la pandemia esta no era significativamente superior a otros episodios de crisis donde la tasa no superaba el 13% de la fuerza laboral. Más aún, si miramos los datos de la pérdida de puestos de trabajo por genero este fue mayor en las mujeres que los hombres y por lo tanto podríamos haber esperado que la tasa de desocupación haya sido más alta en las mujeres que en los hombres. Sin embargo, los datos muestran todo lo contario lo que resulta en cierta medida contradictorio, algo que podemos explicar mirando lo que ocurre con la participación laboral. La evidencia en las crisis económicas es que la participación laboral puede variar en forma considerable en una y otra dirección. Cuando se pierde el empleo la persona tiene dos opciones, la primera salir a buscar un empleo y por lo tanto será capturado por el registro estadístico como desocupado subiendo la tasa de desocupación. La segunda opción, dejar de buscar empleo y salir del mercado de trabajo reduciendo la participación laboral y con ello reduciendo el impacto en la tasa de desocupación. Claramente podemos deducir de esta pandemia que a pesar que hay una mayor pérdida de empleo en las mujeres ellas al mismo tiempo abandonaron el mercado laboral y la búsqueda de empleo mostrando por lo tanto menores tasas de desocupación.

Considerando que en los últimos meses hemos vistos un repunte en la creación de puestos de trabajo y una baja relativa en el desempleo, la evolución del mercado laboral sigue mostrando una preocupante fragilidad para este año y los próximos. Es importante analizar con detención los datos relacionado con el número de empleos creados, pero también el tipo de empleo y la informalidad de este mercado que hace su medición más compleja y el impacto de la política pública en varios ámbitos más limitada.

Es importante y fundamental tener una medición correcta y precisa de la magnitud de los impactos de esta crisis para afinar los instrumentos de política pública tanto en el corto plazo como también los retos que enfrentaremos en dimensión laboral en el largo plazo.

Prof. Ivan E. Araya. Ph.D.

Prof. Ivan E. Araya. Ph.D.

Facultad Ciencias Económicas y Administrativas
Universidad de Concepción