Transitando hacia un recuperación gradual | FACEA UDEC

«Proyectamos un escenario que marca el inicio de una recuperación gradual y que será empujado esta vez por la demanda interna, especialmente el consumo y que mostrara una variación positiva con respecto al año 2023 pero aun modesto.»

Ayer jueves durante la mañana se lanzó en el Club Concepción el Informe Económico Regional (IER) del Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Concepción, edición numero 54, con el análisis y las proyecciones para el 2024.

Con el inicio de un nuevo año es natural que tengamos incertidumbres y preocupaciones con respecto a la evolución de la economia, especialmente considerando el año que recién terminó donde experimentamos los efectos de la política monetaria contractiva para el control de la inflación con los impactos negativos en el consumo y la inversión que se ha visto tanto a nivel nacional como regional. La eliminación de la brecha entre la demanda interna y la capacidad productiva se tradujo en un deterioro en el desempeño de la economía en terminos de crecimiento y mercado laboral pero abre nuevas perspectivas para el 2024 en adelante.

Nuevamente la economía de la región del Biobío durante el 2023 ha mostrado un mejor desempeño que la economía nacional al compara las tasas de crecimiento del producto interno bruto regional con el nacional. En efecto, la economia regional estimamos que creció alrededor de un 5% mientras la economia nacional su crecimiento fue cero. Esto viene a confirmar lo que hemos venido sosteniendo hace ya varios años en diversas publicaciones y foros que la región tiene un comportamiento cíclico diferente al nacional. Una característica importante es que el ciclo regional se recupera primero que el ciclo del país. En otras palabras, lidera el ciclo y por lo tanto es un buen predictor de lo que pueda ocurrir a nivel nacional.

Este desempeño de la económía del Biobío se explica por la demanda internacional por la producción de nuestra región, especialmente en sectores claves como el sector manufacturero (forestal) que a la vez tiene una fuerte participación en la matriz productiva y con dos socios principales como es China y EE. UU. Estimamos que la demanda externa creció 3.9% durante el 2023 lo que es un valor signficativo y relevante dada el nivel exhibido el año 2022.

Por otro lado, durante el 2023 tuvimos una importante contracción de la demanda interna, especialmente el consumo, evolución que muestran sendas similares para la región y el país. De igual manera, la inversión también se ha contraído en forma importante durante el 2023, dinámica que ya tiene varios años.

En nuestro análisis del panorama para el año 2024 proyectamos un escenario que marca el inicio de una recuperación gradual y que será empujado esta vez por la demanda interna, especialmente el consumo y que mostrara una variación positiva con respecto al año 2023 pero aun modesto. Al igual que el año anterior, el escenario internacional en términos de crecimiento de nuestro socios comerciales y el precio de nuestro commoditites permitirá nuevamente una demanda externa que aun mostrara signos positivos pero marginalmente por debajo de los mostrado el 2023, donde para ese año estimamos que nuestras exportaciones regional se expandiron en 3.9%.

Dada las condiciones internas y externas proyectamos un crecimiento de la región del Biobío entre 3.5% y 4.5% lo que significa marginalemente por debajo de lo exhibido durante el 2024 marcando nuestro retorno a su tendencia de largo plazo. Podemos decir entonces que el ajuste esta llegando a su fin y lo que podemos vislumbrar es un trasito hacia una recuperación gradual.

Dr. Iván E. Araya Gómez, Facultad Ciencias Económicas y, Administrativas, Universidad de Concepción.

Columna opinión de El Sur, Viernes 26 de enero de 2024