Noticias estructurales | FACEA UDEC

» Cierra en consecuencia el 2023 con ¨malas noticias estructurales¨, ya que no parece razonable subir impuestos para seguir financiando el aumento del empleo fiscal ni reformar las pensiones para que sea el Estado el que maneje el ahorro de los trabajadores.»

Tras el resultado del plebiscito y luego de un proceso en el que se han malgastado cuatro largos años y más de 150.000 millones de pesos, el Presidente Boric parece haber experimentado un nuevo aire que lo ha llevado, junto a sus respectivos ministros, a retomar la agenda de reformas estructurales, cuales son la tributaria y la previsional.

Sobre la reforma tributaria devenida semánticamente en pacto fiscal, tras su rechazo en la Cámara de Diputados, es bueno hacer un poco de cronología. En efecto, la oferta de campaña del Presidente Boric, plasmada en su Programa de Gobierno, fue hacer una reforma tributaria para recaudar el 8% del PIB -en régimen-. En la actualidad, lo último que ha planteado el Ministro Marcel et al es llevar adelante una reforma tributaria que busca obtener el 2,7% del PIB. O sea, redujo su aspiración recaudatoria en más de un 67%. ¿Era necesario el 5,3% del PIB al que ya no se aspira? ¿Estaba tan claro en que se invertiría? ¿Las cifras actuales son confiables, deseables y responsables?

Por otra parte, esta reforma tributaria, en sus disposiciones relacionadas con la evasión y la elusión de impuestos, le entrega una serie de atribuciones adicionales e invasivas para los contribuyentes al Servicio de Impuestos Internos (SII) que no resultan sencillas de aceptar y aprobar después de los casos del audio del abogado Hermosilla y del escándalo de los $ 240 mil millones que se investigaban hace siete años (!!!) y en que uno de los imputados se autodenunciara en 2018. Lo que los chilenos legítimamente se preguntan es el lugar y las responsabilidades que tuvieron funcionarios del SII que no actuaron con prontitud ante las numerosas señales que dieron los delincuentes responsables del mayor caso de defraudación fiscal de la historia de nuestro país.

Por último, como sabemos, desde que asumió el actual Gobierno, los funcionarios públicos han aumentado abismalmente -estudios señalan que en cien mil- sin que se sepa concretamente que hacen y menos, el mecanismo de selección y reclutamiento con que fueron enrolados. Esto implicaría un 52% más de funcionarios públicos que hace 8 años. ¿Será esta la «orientación estratégica e inclusiva del gasto público» que proponía el Presidente en su momento?

Sobre la reforma previsional el Gobierno ha anunciado, una vez más, la presentación de indicaciones al proyecto en trámite legislativo hace años. Como elocuente prueba de la ideologización con que se aborda, se propone que, de los 6 puntos de cotización adicional contemplados, 3 se destinarían a lo que denominan solidaridad (que es simplemente un sistema sobrepuesto de reparto, incluyendo privilegios), 2 puntos a capitalización individual y 1 al fomento del empleo femenino. En resumen, las autoridades del Estado quieren manejar 4 de los 6 puntos de cotización previsional adicional. Eso se estrella con la aspiración de más del 70% de los chilenos que quiere que la cotización adicional vaya íntegramente a su cuenta individual. Cabe recordar que en el primer proceso constituyente la iniciativa popular de norma que tuvo más apoyo ciudadano fue precisamente ¨con mi plata no¨.

Cierra en consecuencia el 2023 con ¨malas noticias estructurales¨, ya que no parece razonable subir impuestos para seguir financiando el aumento del empleo fiscal ni reformar las pensiones para que sea el Estado el que maneje el ahorro de los trabajadores.

.

Sergio Escobar Miranda, Facultad Ciencias Económicas y Administrativas, Universidad de Concepción.

Columna opinión de El Sur, Viernes 22 de diciembre 2023